viernes, 28 de febrero de 2014

Pasas en aguardiente

Ingredientes
Pasas de uva moscatel
Aguardiente seco
Un bote de cristal de boca ancha

Elaboración
Preparar pasas en aguardiente es de lo más sencillo, pero como todas las recetas simples, tiene su intríngulis que hay que saber.
A continuación, os doy la receta que se ha seguido siempre en casa.
Antiguamente, después de recolectar las pasas del pasero, se seleccionaban los racimos y se guardaban para el invierno como postre. También se escogían para poner en aguardiente.
Para elaborar esta receta correctamente, se deben de coger las pasas que tienen rabillo e ir cortando con la tijera y dejando un pequeño trozo del mismo. Las que no lo tienen no se pueden poner en aguardiente porque estas pasas duran mucho tiempo (hasta varios años), pero si se arranca el rabillo, cuando empiezan a hidratarse con el licor, comienzan a salirse los azúcares propios de la fruta y, en poco tiempo, quedan secas y azucaradas. Por ello, habría que consumirlas rápidamente.

Para preparar las pasas en aguardiente, una vez que estén seleccionadas y cortadas, las iremos depositando en un bote de boca ancha hasta llenarlo algo menos de la mitad. El resto, se cubre de aguardiente. A los pocos días, se puede revisar y, si vemos que falta aguardiente, volvemos a rellenar.
Para servir, se coloca una copa con varias pasas acompañadas del líquido de maceración.
Estas pasas siempre se han comido en Navidad y durante el invierno.

Esta misma receta sirve para elaborar con cerezas, como podéis comprobar.

miércoles, 26 de febrero de 2014

Crema de hinojos

Mi hija Lydia estuvo el pasado domingo en el Mercadillo ecológico de Coín y me trajo un hinojo fresco para que elaborar una crema que a ella le encanta.

Ingredientes
Un bulbo de hinojo
3 nabos
1 cebolla
1 puerro
3 zanahorias
1 apio entero
2 patatas
4 cucharadas de aceite
Una pastilla de caldo vegetal bio
Sal

Elaboración
Limpiar las verduras aprovechando de los nabos todos los tronchos verdes que estén tiernos.
Pelar, limpiar y trocear todas las verduras.
Poner a cocer las verduras cubiertas de agua caliente junto con el aceite. Cuando estén cocidas, agregamos la sal a gusto y la pastilla de caldo vegetal.
Continuamos la cocción durante cinco minutos.
Después, trituramos y pasamos por el chino.
Este plato lo he servido con carnita vegetal de acompañamiento, que en casa nos gusta a todos.
La carnita la pasé por la sartén con un poco de aceite y ajo. Ese es el aspecto que presenta servida en la fuente.

lunes, 24 de febrero de 2014

Potaje antiguo de alubias y coliflor

Ingredientes
500 g alubias
500 g de coliflor
125 g de arroz (puede ser vaporizado)
Media cabeza de ajo asada
1 cebolla con dos clavos de olor hincados
1 pimiento verde
1/2 tomate
1 hoja de laurel
Un trozo de costilla salada
Unos granos de pimienta
Una cucharilla de pimentón
50 ml de aceite
Sal

Elaboración
Poner al fuego las alubias cubiertas de agua fría. Cuando empiecen a hervir, escurrir y poner agua fría nuevamente hasta cubrir junto con la costilla, el aceite, la cebolla, el pimiento, el ajo, el laurel, la pimienta y el pimentón.
A continuación, cortar el hervor dos o tres veces añadiendo un vaso de agua fría. Cuando veamos que las alubias están casi cocidas, agregamos la coliflor y a los diez minutos el arroz, comprobando que tenemos suficiente caldo.
Rectificamos de sal y dejamos hacer hasta que el arroz esté en su punto.
En caso de que las alubias se han cocido antes de agregar el arroz, colaremos un poco de caldo y coceremos el arroz aparte. Cuando esté hecho, lo unimos al potaje.
Nota: a este potaje me gusta ponerle tomate. Mi madre dice que los potajes antiguos no lo llevan. Ella nunca se lo ha puesto.

jueves, 20 de febrero de 2014

La zanahoria morá ha retoñado

Mi cuñado, que tiene muy buena mano para la agricultura, sembró la zanahoria morada y ya ha crecido bastante como se puede observar en la imagen.
Confiemos en que podamos recoger algunas semillas.
 

martes, 18 de febrero de 2014

Recuerdos de una niñez maravillosa


El pasado 14 de febrero mi madre cumplió 89 años. Durante la celebración, estuvimos rememorando momentos felices y viendo fotos de su juventud.
Abajo, sentadas, mi hermana y yo. Arriba, mi madre (la del sombrero) y su prima.

Cuando yo era pequeña, no teníamos el kiosco de las chucherías al lado, pero contábamos con los primeros frutos de la temporada: nueces, almendras, manzanitos enanos, azafaifos, etc. Tampoco teníamos parque infantil, pero dos piedras enormes, las resbaladeras, hacían las veces de tobogán. Nos sentábamos en sacos y nos tirábamos desde arriba.
Aquí estamos con amigos y familiares y delante nuestra perrita Durica.

Asimismo, tampoco había teléfonos (ni fijos ni móviles) ni programas de mensajería instantánea que pudieran sustituir la autenticidad de un encuentro real, de modo que la llegada de nuestros parientes de otros puntos de Andalucía o de fuera de España se celebraba como un extraordinario acontecimiento. Así que, cuando venían al campo, salíamos a caminar y a disfrutar de la belleza del paisaje y del aroma de la vegetación.
Mi padre, mi madre a su lado, mi hermana, una amiga de mi madre y yo (en primer plano)

Teníamos lo elemental; éramos muy felices. Ni mi hermana ni yo recordamos que mi padre (que ya no está con nosotros) nos hubiera regañado alguna vez.
En primer plano mi hermana, yo, mi madre, su prima y sentada, una amiga.

martes, 11 de febrero de 2014

Frangollo canario

Uno de mis yernos es tinerfeño y de vez en cuando preparamos algunas recetas canarias en casa. Ya iré subiendo al blog alguna de ellas. Hoy comparto con vosotros un clásico: el frangollo.

Ingredientes
500 gr. de harina para frangollo o harina de maíz precocida
250 gr. de azúcar
150 gr. de almendras machacadas
150 gr. pasas sultanas o esmirnas
2 l. de leche entera
3 cucharadas soperas de mantequilla
3 yemas de huevo
Ralladura de limón
Piel de limón
Canela en rama
Canela molida
Helado de turrón (opcional)

Elaboración
Hervir la leche con una rama de canela y la cáscara de un limón.
Dejamos infusionar hasta que esté templadada. Después colaremos y agregamos la harina hasta disolver completamente.
A continuación, ponemos al fuego removiendo constantemente. Cuando empiece a hervir, se le añaden las almendras, el azúcar, las pasas y la mantequilla. Se deja al fuego removiendo a menudo durante 25 minutos.
Cinco minutos antes de terminar la cocción, agregamos las tres yemas removiendo hasta que veamos que están hechas.
Apagamos el fuego y ponemos sobre un molde untado con aceite o mantequilla.
Para servir, volcamos sobre una fuente y adornamos a gusto con canela molida, pasas o una bola de helado de turrón.

domingo, 9 de febrero de 2014

Piadina de salmón y de jamón

Ingredientes:
1 lámina de pan lavash
200 gr. de salmón ahumado
Rúcula selvática
1 tarrina de queso de untar a las finas hierbas

Para la de jamón:
1 lámina de pan lavash
Queso de untar natural o aceite oliva virgen
Jamón serrano

Elaboración:
Colocamos el pan sobre un paño de cocina. Si está algo seco, humedeceremos ligeramente y dejamos tapado durante 5 minutos.
Seguidamente untamos con una capa de queso. Ponemos sobre la misma una abundante cantidad de rúcula y cubrimos con las lonchas de salmón. 
Enrollamos y si no se va a servir en el momento, envolvemos en el paño y dejamos en la nevera.
Para servir, se puede cortar en trozos pequeños (para aperitivo) o en trozos más grandes (si es para primer plato).

Para la receta de jamón, extendemos el pan y untamos con crema de queso natural o aceite de oliva virgen. Cubrimos con el jamón serrano. Enrollamos y procedemos de la misma manera que con la receta de salmón.
Esta es una receta rápida, sencilla y riquísima.

viernes, 7 de febrero de 2014

La importancia de elegir la harina adecuada

Aunque los roscos de vino solo se elaboran en casa durante la Navidad, estos días he tenido que hacer de nuevo a petición del más pequeño, mi nieto, que a sus 27 meses todos los días me pedía "coscos" hasta que se terminaron (y qué no haría una abuela por su nieto).
Para su elaboración, ya mi abuelo en los años 30 empezó a sembrar un trigo especial denominado -según mi madre- cañivano. La característica del mismo es que producía muy pocos granos pero su harina era muy fina. Mi abuelo poseía un molino harinero y era experto en la materia. Mi madre recuerda que él solía sembrar siete tipos de trigo, pero ella solo recuerda cinco: recio, raspado, cañivano, tresmesino y raspinegro.
Un profesional de la cocina dijo en una ocasión que para los roscos de vino la harina adecuada era la de fuerza. Yo normalmente uso la que venden en las panaderías para dulces o una de repostería con un 20%de harina común. Suelo usar 5 kilos de harina de repostería y más de un kilo de harina común; depende de lo que vaya pidiendo la masa. El resultado es un rosco tierno y hojaldrado.
En esta ocasión he querido probar la harina de fuerza y ha quedado un rosco apelmazado, más difícil de trabajar y con más sabor a harina. En conclusión, no parecía la misma receta. Por eso, insisto: diferentes clases de harina nos darán diferentes resultados. 
Así, desde mi blog me gustaría pedir a los fabricantes de harina que ofrezcan más información en los envases. Es algo primordial. Por ejemplo, la cantidad de proteínas (del 12 al 14; del 10 al 12 o del 6 al 8), las clases de trigo, la procedencia y para qué elaboraciones son últiles. En resumen, toda la información posible. Yo soy de las que leen todas las indicaciones de cada producto y, si es deficiente, busco otro que me ofrezca mayor información.

miércoles, 5 de febrero de 2014

Endivias a la crema

Ingredientes
1 endivia por persona
50 gr. de queso azul
150 gr. de jamón cocido
1 brick de nata para cocinar
3 dientes de ajo
Harina
Aceite
Sal

Elaboración
Atar las endivias con hilo de cocina y cocer en agua con unas gotas de limón.
Cuando estén cocidas, escurrir y secar con un paño de cocina.
Seguidamente, enharinar y freír en aceite de oliva.
Después, pondremos un fondo de aceite en la sartén y freímos los ajos picados. Antes de que empiecen a dorarse, añadiremos el jamón cortado en juliana. Salteamos y agregamos la nata y el queso azul troceado.
Cocemos durante unos minutos. Salseamos las endivias y servir seguidamente.