Pasas de uva moscatel
Aguardiente seco
Un bote de cristal de boca ancha
Elaboración
Preparar pasas en aguardiente es de lo más sencillo, pero como todas las recetas simples, tiene su intríngulis que hay que saber.
A continuación, os doy la receta que se ha seguido siempre en casa.
Antiguamente, después de recolectar las pasas del pasero, se seleccionaban los racimos y se guardaban para el invierno como postre. También se escogían para poner en aguardiente.
Para elaborar esta receta correctamente, se deben de coger las pasas que tienen rabillo e ir cortando con la tijera y dejando un pequeño trozo del mismo. Las que no lo tienen no se pueden poner en aguardiente porque estas pasas duran mucho tiempo (hasta varios años), pero si se arranca el rabillo, cuando empiezan a hidratarse con el licor, comienzan a salirse los azúcares propios de la fruta y, en poco tiempo, quedan secas y azucaradas. Por ello, habría que consumirlas rápidamente.
Para preparar las pasas en aguardiente, una vez que estén seleccionadas y cortadas, las iremos depositando en un bote de boca ancha hasta llenarlo algo menos de la mitad. El resto, se cubre de aguardiente. A los pocos días, se puede revisar y, si vemos que falta aguardiente, volvemos a rellenar.
Para servir, se coloca una copa con varias pasas acompañadas del líquido de maceración.
Estas pasas siempre se han comido en Navidad y durante el invierno.
Esta misma receta sirve para elaborar con cerezas, como podéis comprobar.