La salsa ravigote se la debo, como muchas otras delicias culinarias, a uno de los buenos cocineros que ha dado Marbella: mi cuñado Antonio Rodríguez Sánchez, que regentó varios establecimientos de hostelería gracias a la inestimable colaboración de su esposa, Loli Solás: César en Puerto Banús; la Esquina de Antonio, en el centro de Marbella y, por último, el restaurante Ciaboga ubicado en la Casa del Corregidor en la Plaza de los Naranjos. Hoy sus dos hijos mayores, Antonio Luis y Juan Jesús, continúan la saga familiar que empezó con el abuelo.
Próximamente publicaré una entrada como él se merece dedicada a su gran trayectoria profesional.
Ingredientes
Carne cocida (en este caso morcillo del cocido)
1 cebolla fresca
6 pepinillos medianos
3 cucharadas de alcaparras
1 bote de aceitunas a las finas hierbas
2 cucharadas de perejil picado
2 tomates maduros para ensalada
1 cucharada de cebollino
1 o 2 dientes de ajo
1 rama de estragón
5 cucharadas de aceite
2 cucharadas de vinagre
Sal
Pimienta
Lechugas (a gusto)
Elaboración
En primer lugar, preparar la salsa. Picar la cebolla, los pepinillos, las alcaparras, las aceitunas, el cebollino, el ajo, el perejil, el estragón y aderezar con sal, aceite, vinagre y pimienta. Se le puede poner, si gusta, apio picado.
Colocar en un bol la carne y desmenuzar en finas hebras.
Agregar el tomate pelado y picado y mezclar con la salsa.
Si es necesario, se rectifica de sal y pimienta.
Para servir, colocar un lecho de lechuga y poner encima el salpicón.
Servir inmediatamente porque la lechuga se ablanda rápidamente.
A esta ensalada también se le puede poner huevos cocidos y aguacates.